¿Y si lográramos ser antifrágiles para superar la Covid20?

El caso es que estos días estoy releyendo “Antifrágil”, de Nasim Nicholas Taleb, el autor de “El cisne negro”.  Lo había leído hace no mucho y en estos días de confinamiento me ha apetecido saborearlo mejor porque tiene mucho que ver con cómo podemos aprovechar la situación actual del covid19 y lograr que cuando el covid20 llegue, nos parezca un “business as usual”. Por eso quería recomendaros el libro: es fresco, retador, te hace pensar y es muy inspirador.

Voy a tratar de no hacer spoiler y compartiros algunas ideas:

  • El concepto antifrágil es super potente. Está claro que es lo opuesto a frágil y que frágil según la RAE es:

1. adj. Quebradizo, y que con facilidad se hace pedazos.

2. adj. Débil, que puede deteriorarse con facilidad. Tiene una salud frágil.

3. adj. Dicho de una persona: Que cae fácilmente en algún pecado, especialmente contra la castidad.

4. adj. Caduco y perecedero.

A lo frágil, todo lo que es volátil, los daños, el caos, el desorden, los imprevistos, la incertidumbre y cualquier estresor le causan daños, porque son enemigos de la fragilidad.

¿Pero qué significa lo opuesto a frágil? Para Taleb, aquello que se beneficia de una crisis, que crece justo cuando hay volatilidad o desorden o estresores o riesgo o incertidumbre.

  • Esta propiedad ha estado detrás de las revoluciones, la innovación disruptiva, la supervivencia empresarial, las bacterias resistentes y es más, de nuestra continuidad como especie. Por eso es relevante pensar en ello.
  • Antifrágil no es ser robusto (que resiste bien los golpes y sigue igual, como un buen boxeador), no es ser resiliente (que después del golpe te recuperas). Es aprovecharse de las peores circunstancias y el desorden para beneficiarse.
     
  • La antifragilidad nos ayuda contra los Cisnes Negros.

Un Cisne Negro es un tipo de sucesos que suceden a gran escala, que son imprevisibles, irregulares y con unas consecuencias brutales que nos sorprenden y a la vez generan daños a algunos observadores que no lo han previsto y a los que llama “pavos”. [Un carnicero alimenta durante muchos días a un pavo. El pavo es feliz. Y entonces llega el día de Acción de Gracias y ser un pavo ya no es muy buena idea… El día de Acción de Gracias será un suceso de Cisne Negro pero solo para el pavo, no para el carnicero. Esta historia nos muestra un tremendo error: confundir la ausencia de evidencias (de algo que se avecina) con la evidencia de ausencia.]
Esto tiene que ver con cuando uno prevé riesgos pensando en “peor escenario” pensando en lo que ha ocurrido en el pasado y cuando ocurren situaciones de Cisne Negro entonces se dice el clásico “nunca había pasado algo así”.

Vienen tiempos para cultivar y practicar antifragilidad, como personas y como organizaciones y sin duda, las nuevas formas de trabajo (guiño guiño) nos han ayudado mucho en estos momentos y nos tendrán que ayudar mucho más a ser mucho mejores y .

Post Data: Estos días atrás yo mismo he usado el concepto de “Cisne Negro” para referirme al Covid19. Yo estaba confundido. Nassim Taleb ha aclarado en la siguiente entrevista que no es un Cisne Negro, que hasta él había anticipado que algo así aparecería y además había casos como los previos SARS, etc.